El domingo 5 de febrero de 2017, en la cadena de televisión del Estado Francés, canal 5, en la noche, se difundió un reportaje sobre la concha de abanico en el Perú. Este reportaje fue realizado con la ayuda del CNCI en Francia, el Centro Nacional del Cine y de la Imagen Francesa. Este reportaje, subvencionado con los impuestos de los franceses, fue difundido en la televisión del Estado francés para promover la producción francesa de concha de abanico demonizando la producción de la concha de abanico peruana. Quienes quieren realizar un documental deben dar pruebas de objetividad. Lo que vimos este domingo no fue un documental sino un montaje atacando a los humildes pescadores peruanos que no tienen como defenderse ante los medios financieros a disposición del proteccionismo francés, y, para añadir mala suerte, difundido en la víspera de la destrucción tanto de casas como de infraestructura debido a las lluvias provocadas por el fenómeno de El Niño.
“No hay mejor concha de abanico que la local”, fueron las últimas palabras pronunciadas en este reportaje mostrando imágenes bonitas de una fiesta de la concha de abanico francesa en un pueblito en Francia. Antes de este ambiente folclórico, el reportaje atacó a la concha de abanico peruana, ¿por qué? ¿Para disminuir su consumo con el fin de aumentar el precio de la concha de abanico pescada en Francia? La producción francesa es limitada, no es suficiente para cubrir la demanda. El precio al consumidor de la concha de abanico francesa asciende fácilmente a 40 euro por kilo para el producto congelado, ¿y aún así quieren aumentar el precio para al consumidor? Hay lugar en el mercado francés para la concha de abanico francesa y la peruana, pueden cohabitar. Querer disminuir el consumo de la concha de abanico Peruana solo puede aumentar los precios, no creo que esto es lo que desean los consumidores franceses.
La fábrica Peruana filmada en el reportaje cuenta con el certificado de calidad IFS, es el certificado más prestigioso reconocido en Francia. Esta fábrica está muy lejos del asentamiento humano de Parachique. La verdad, y la conozco pues he estado ahí, no hay fábricas de concha de abanico en este asentamiento humano. Las fábricas donde la concha de abanico es pelada y congelada se encuentran en las zonas industriales completamente separadas de Parachique. El muelle donde los pescadores descargan la concha de abanico viva, igualmente se encuentra lejos del asentamiento humano. La concha de abanico es después transportada en camiones frigoríficos hacia las fábricas. No se produce contacto alguno entre las conchas de abanico y el asentamiento humano, es la verdad. Todas las fabricas principales de comercio de la concha de abanico en Perú son fábricas de alta tecnología, cuentan con certificaciones de auditores y son controladas por inspectores europeos.
El periodista menciona que existe un riesgo de contaminación en la bahía de Sechura, pero el reportaje no dice la verdad. La realidad es que Perú gasta millones de dólares al año en análisis para detectar contaminantes tales como e.coli o hepatitis. Para poder exportar la concha de abanico, el agua del océano es analizada, la concha congelada tambien es analizada por laboratorios especializados. Una vez importada a Francia, la mayor parte de los importadores disponen el control de la concha de abanico por parte de laboratorios franceses, y se efectúan numerosos controles. Hasta la fecha, no ha habido incidentes mayores con la concha de abanico peruana comprada por importadores franceses pues los controles en Perú son estrictos, eficaces, lo que da prueba de que los sistemas de control funcionan bien, tanto en Perú como en Francia.
Las zonas de pesca en Perú son controladas. Si se prevé una contaminación, la zona se cierra de inmediato. La cosecha queda prohibida hasta que los análisis confirmen que se ha descartado todo peligro. Este sistema de apertura y de cierre de zonas fue instaurado con la ayuda de la Comunidad Europea, es la copia conforme de lo que se hace en Europa. El cierre de zonas de mariscos también existe en Europa: el manejo de contaminación fecal se basa en las alertas enviadas por Ifremer (Instituto francés de Investigación para la Explotación del Mar). Una vez que se constata la contaminación en una zona de pesca francesa, las autoridades la cierran. Las zonas de ostras en Francia regularmente se cierran debido a contaminación de diversos tipos, como el virus de herpes. Es correcto recordar que el riesgo de contaminación existe en Francia también, aunque los autores del reportaje prefirieron pasarlo por alto y enfocarse a las conchas de abanico peruanas.
El Sr. Antoine, propietario de una tienda de comida en un pueblito en Francia, fue filmado en cámara escondida en un supermercado. En la zona de las bolsas de conchas de abanico, el lee el país de procedencia y dice en tono sarcástico: “viajamos”. En efecto, los productos viajan mucho. En los supermercados peruanos, encontramos vino francés, queso francés, mantequilla salada francesa y otros productos franceses, ¿necesitamos importar mantequilla francesa? Se produce mantaquilla en el Perú…
Según lo que deja entender el video, la concha de abanico peruana no califica para la denominación noix de Saint-Jacques a pesar que ha recibido la autorización de la Organización Mundial del Comercio (OMC) de acogerse a dicha denominación en Europa. Si Francia no acepta la decisión de la OMC que la concha de abanico peruana puede llamarse así, entonces el famoso Bordeaux no es un vino sino un jugo de uvas licoroso ?? Con qué derecho los realizadores del video insinúan que la concha de abanico peruana no es noix de Saint-Jacques cuando Francia ha aceptado la decisión de la OMC ? Es una afirmación ilógica ya que, justamente, la OMC se expresó al respecto. Francia estuvo presente en el comité de la OMC cuando se adoptó el acuerdo de que la concha de abanico peruana puede recibir la importante denominación noix de Saint-Jacques.
El reportaje es tendencioso, deplorable, juega con los sentimientos de los franceses con el fin de influir, todos los medios fueron puestos en funcionamiento para ello, hablando de los humildes, que no tienen agua potable ni alcantarillado, personas pobres buscando algunas conchas de abanico para vender en los restaurantes locales, casas construidas con ladrillo y barro… como si eso pudiera interesar a los franceses. Habla de excavaciones en el vertedero de desechos de concha de abanico, concha de abanico vendida en el mercado minorista local, la cual los realizadores del reportaje afirman no están destinadas al mercado internacional, no se trata de exportar a Francia estas conchas de abanico recicladas… no serán, de cualquier forma, exportadas a Francia. ¿Por qué incluir estas imágenes de no ser para denigrar la concha de abanico del Perú? Ha sido diabolizada voluntariamente, ello parece furiosamente una maniobra baja, una tentativa de boicot con el fin de desalentar a los franceses a consumirla.